Consejos para la Novia el día de la Boda

DESAHÓGATE HORAS ANTES DE LA BODA

Deja salir tus emociones unas horas antes de la Boda, y si tienes que llorar, LLORA. Puedes llorar de nervios, de inseguridad, de felicidad o de sentimiento. Reúnete con tu familia, con tus padres y hermanos y/o hermanas. Dale las gracias, diles cuánto les quieres y lo contenta que estás de que formen parte de tu gran día.

Cuando somos adultos nos cuesta mucho decirles a nuestros familiares qué sentimos por ellos y nos olvidamos un poco de palabras tan significativas como “te quiero”, “gracias” y “te necesito junto a mí”.

Servirá para soltar la tensión del día y que después de descargar todas las emociones que están encerradas en ti, los nervios pasen a un segundo plano y puedas centrarte en disfrutar de uno de los momentos más felices de tu vida.

Además, tendrás una conexión especial ese día con las personas más cercanas a ti, durante la ceremonia y la celebración habrá sonrisas, miradas cómplices y puede que alguna lagrimita pero no una llantera o un nerviosismo que haga que no te salgan las palabras cuando tengas que leer tus votos o dar el SÍ QUIERO.

ENTRADA Y SALIDA DEL COCHE

Puede parecer una tontería, pero es un detalle super importante ya que son los primeros momentos en los que lucirás tu vestido de Novia y cuándo te harán muchas fotos. Es primordial para que no se arrugue el traje y que hagas una salida del coche con elegancia. Con estos fáciles trucos saldrá todo de 10:

• Debes entrar por la puerta contraria a la que vayas a salir. Suele ser por la puerta de atrás del conductor.
• Siéntate en diagonal con el conductor, y el padrino deberá sentarse a tu izquierda detrás del conductor.
• Los únicos pasajeros del coche debéis ser el conductor, el padrino y tú.
• Retira la cola hacia un lado para entrar y cuando ya estés sentada dentro del coche déjala caer sobre tu regazo.
• Cuando llegues al lugar de la ceremonia, primero sale el padrino y te aguanta el ramo, después despliega la cola y deslízate por el sillón para salir.
• Coge tu ramo a la altura de la cadera y ya puedes hacer tu aparición con elegancia.

ENTRADA DE LA NOVIA EN LA CEREMONIA

Otro de los momentazos el día de la Boda, momento de nervios por excelencia, cuando entráis en la Iglesia o en la ceremonia civil. Y precisamente por culpa de los nervios se suele ir deprisa, tensa y mirando al suelo. ¡ERROR!

Ese instante en el que todos los invitados te ven, y sobre todo tu Novio al final del pasillo debe quedarse gravado en las retinas de todos los asistentes a tu Boda. Haz que suceda, tú tienes el poder para hacerlo realidad:

• Debes entrar despacio, sonriendo, con los hombros hacia atrás y mirando al frente, hacia tu Novio y si quieres de vez en cuando mirando a los lados a los invitados.
• Justo cuando pases el umbral, párate, respira hondo y sacúdete todo los nervios (de manera figurada). Mira a tu alrededor y absorbe ese instante lleno de emociones y amor.
• Empieza a caminar, despacio y agradece con una sonrisa todos los piropos y palabras bonitas que vas a ir recibiendo.

Todos estos consejos te los puede ir apuntando en el momento exacto tu Wedding Planner para que no se te olvide nada por el instante de nervios y que también te ayudará a colocarte bien la cola, el velo y te aguantará el ramo mientras te recompones.

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