Para ir preparados y que no se os pase ningún detalle, os hemos preparado una lista de puntos a tener en cuenta:
¿Qué tomaréis en la prueba de menú?
Probaréis el menú que anteriormente hayáis elegido, además de algún que otro aperitivo, entrante y plato principal que el catering incluya para que comáis más opciones y podáis elegir.
Igualmente, la bebida que toméis será la misma que el día de vuestra Boda.
Sobre los postres, ha caído en desuso la tarta nupcial y se ofrece un postre ya emplatado desde la cocina. Así que os ofrecerán un surtido de porciones de postres para que elijáis vuestro preferido.
Siempre aconsejamos hablar con vuestro/a comercial del catering para confirmar todo lo que os van a servir y que no os quedáis con las ganas de probar nada más.
¿Cuántas personas pueden asistir?
La prueba de menú suele realizarse para un total de 6 comensales, los Novios y 4 personas más a su elección, aunque si queréis que asista alguien más se tiene que avisar al catering (casi con toda probabilidad os cobrarán esos cubiertos de más).
Variaciones en los menús
Es muy importante consultar con los invitados que asistirán a vuestra Boda si tienen algún tipo de alergia o intolerancia, o si hay vegetarianos o veganos. Es necesario indicarlo cuanto antes al catering para que puedan realizar un menú alternativo y adaptado a cada necesidad.
¿Y si quiero cambiar o incluir algo más?
Precisamente para esto sirve la prueba de menú. Puede que los cambios estén incluidos en el mismo rango de precio que ya habíais elegido o que se deba añadir un suplemento por mejora del menú.
No es lo mismo que os encante un vino en concreto y que lo sirvan sólo en la mesa nupcial a que el catering deba adquirir ese vino para todos los invitados. El gasto que debe soportar no es el mismo.
O si lo que queréis es añadir más aperitivos o cambiar el plato principal por uno superior, sí que supondría un suplemento en el precio del menú.
¿Cuánto puede durar una prueba de menú?
Entre 3-4 horas, no sólo comeréis, también tendréis que dedicar tiempo en ver la decoración y todos los extras que ofrece el catering y que os podría interesar.
A parte de la comida y la bebida, ¿qué más podremos elegir?
La presentación, la mantelería, la cristalería y el menaje también son puntos que tenéis que valorar y elegir.
Al igual que la decoración, los centros de mesa y la papelería. Hasta el tipo de mesas y de sillas.
Veréis los montajes que el catering puede ofreceros, algunos incluidos en el precio del menú y otros que llevarán un suplemento.
Por ejemplo, las sillas de palillero son las que suelen estar incluidas en el precio pero si queréis sillas crossback llevarán un suplemento de x€ por comensal.
¿Y si no nos gusta la decoración o los montajes del catering?
Primero, hablad con el catering para consultarles si pueden cambiar aquellas cosas que no os gustan. O podéis buscar empresas externas para la decoración, la Deco floral, la papelería, etc. Incluso puede que el catering os descuente un pequeño importe (casi ínfimo) por no usar sus servicios.
¿Qué pasa con la recena?
Depende del catering que hayáis elegido, puede que la recena esté incluida en el precio o no. Seguro que ya es un punto que habéis hablado con vuestro/a comercial antes de contratar. No suele ser nada del otro mundo, unos montaditos que se reparten a la mitad de la barra libre.
Pero siempre tenéis la opción de contratar con el mismo catering algo más elaborado (comida mexicana, caldo de la abuela, chocolate con churros) por un incremento por invitado o por un coste fijo. Incluso podríais contratar una empresa externa que se dedique en exclusividad a ello.
Si después de todos estos consejos, os surge alguna otra duda estamos a vuestra disposición para aclararos cualquier punto que necesitéis.